Se posterga para 2015 la conformación de un fondo que atienda los pasivos ambientales

Carlos Gold, secretario de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA) fue designado por sus colegas como encargado de gestionar frente a Omar Judis, el Secretario del Ministerio de Medio Ambiente, y su equipo técnico, el armado de una legislación que atienda la contaminación de los terrenos donde están ubicadas las bocas de expendio.

Para ello llevó adelante varias reuniones y logró que las autoridades comprendan la importancia de establecer mecanismos financieros que eviten a los expendedores la contratación del Seguro Ambiental Obligatorio (SAO) que, entiende Gold, es sólo una garantía para el Estado y un costo económico importante que no resuelve el problema.

Cuando parecía que se podía conformar un mecanismo para reunir recursos que serían destinados a la remediación, ocurrieron algunas modificaciones en el organismo que dilataron la determinación de la figura legal.

“El proyecto de fideicomiso para reparación ambiental de las estaciones de servicio continúa en etapa de elaboración, a través de una consultora contratada por la secretaría, pero frente a situaciones del mismo tenor vinculadas al área industrial, que son prioritarias para el Gobierno, por ahora el tema quedaría postergado para 2015”, señala Gold en diálogo con localhost/surtidores.

Quedaría entonces definir la formación de un comité de fiscalización que administre los recursos y la determinación de los requerimientos que se deben pautar para realizar los trabajos de obra en los terrenos. Los plazos es otro punto que permanece en análisis por los expertos.

De acuerdo a incipientes evaluaciones y experiencias de clausuras en algunas provincias, los puestos de mayor antigüedad son en principio los que mayor contenido de hidrocarburos contienen en los suelos. Los más modernos y nuevos, en cambio, se fueron amoldando a las normas de seguridad más exigentes. De ahora en adelante, los riesgos serán aún menores, ya que la Secretaría de Energía estudia obligar a las estaciones a contar con tanques de almacenamiento de combustibles doble pared, que evitan los derrames.